domingo, 20 de octubre de 2013

la responsabilidad de enseñar

Justo antes de empezar este comentario, leo en el periódico El Pais en edición digital, un artículo sobre el proyecto "Navegamos Juntos" del Instituto Público "Gabriel García Márquez" en Tiétar (Cáceres). En este proyecto, un grupo de estudiantes de "diversificación" se transforman en profesores de personas mayores en uso de las tecnologías de la iformación y la comunicación. Os copio el enlace

http://blogs.elpais.com/escuelas-en-red/2013/10/contigo-mis-males-tienen-remedio.html


Pienso en la clase del lunes pasado, concretamente en enseñar sin dominar la materia. Pienso que nadie sabe de todo y que por otra parte no hay nadie que no sepa absolutamente nada. También pienso en nuestro rol actual de alumnos y en nuestro futuro como profesores y en las que he sido profesora (de clases particulares) y en los momentos en los que he sido con horas de diferencia profesora y alumna.
Considero que es cierto que al alumno presupone que su profesor domina la materia y el profesor se siente más cómodo en la clase cuanto más controla el tema y me viene a la cabeza que la relacción alumno- profesor tiene un gran componente de sinceridad, de honestidad, de decir en un momento dado "esto no lo sé seguro, lo miro y os digo mañana" y que de esa sinceridad parte mi responsabilidad por estar lo más preparada posible, lo más actualizada posible, la responsablidad por controlar la materia como respuesta a la confianza que el alumno pone en nosotros... las profesoras que pusieron en marcha el proyecto, Inma Muñoz e Inma Carretero, ponen el acento en la motivación y lo llaman la responsabilidad por enseñar de unos y otros.


2 comentarios:

  1. Hola María,

    Gracia por el link a la noticia y por tu reflexión.

    Para mí, se trata de un muy buen ejemplo de una propuesta educativa planteada desde una perspectiva sociocultural. En mi opinión, al menos el planteamiento, destaca por su coherencia, por tener en cuenta muchos aspectos de los alumnos que comúnmente pasan desapercibidas, o ni se atienden (aunque, como ejemplifica esta experiencia, sí interesa atender): ¿cuáles son sus fortalezas?, ¿cuales sus debilidades?, ¿cómo hacer que ambas se integren en una actividad?, ¿cómo hacer que las unas sirvan para superar las otras? Más aún, ¿cómo enseñar algo a la vez que se facilita el desarrollo personal de los alumnos?

    Algo que me llama la atención es el verbo que utiliza el autor para referirse a lo que hicieron estas dos profesoras al plantear este proyecto: "rebelarse". Ja! Lo que sí es "revelador" es que para plantear propuestas educativas coherentes (y que dan buenos resultados, como esta misma) haya que "rebelarse".

    Quién sabe. Quizás no sólo haya sido "educativo" para el grupo de adolescentes y de personas mayores incluidas en el proyecto.

    Un saludo
    David

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  2. Me ha parecido una idea genial. Creo que la clave de todo también es la motivación de los alumnos, y estas profesoras han sabido hacer que todos estén motivados, que vean la actividad como útil y que, además, aprendan de los mayores. Como dice David, con esto se pueden descubrir cualidades de los alumnos que habrían quedado ocultas de otra manera, y se puede ver qué es lo que se les da mejor en cada caso. Un link muy interesante, ¡gracias!

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